Volcán Irazú

El Irazú, con sus 3432 metros, es el volcán activo más alto de Costa Rica. Se encuentra a más o menos hora y media de San José y se puede llegar hasta la cumbre en una línea regular de autobuses con salida enfrente del Teatro Nacional por unos 2000 colones por persona(unos 4$). También es verdad que, al ser un parque nacional, hay que pagar al llegar 10$ para entrar, como en todos los parques nacionales, se supone que para su conservación pero por lo que nos han contado varios guardas ese dinero pocas veces acaba usándose con este fín.

Se nota el efecto de la altura una vez allí, te sientes más cansado al andar y hace un poco de frio(por esto último Ana y yo no nos dimos cuenta de echarnos protección contra los rayos solares y volvimos a casa con la cara y cuello quemados).

Nada más llegar allí nos soprendió ver a este animal que no sabíamos muy bien lo que era. Al llegar a casa y gracias a Google, descubrimos que era un coatí.

Me gustó mucho y le tiré unas cuantas fotos, sobretodo me sorprendió su descaro y que no le importaba estar cerca de la gente. Luego descubrí porque...

Al igual que pasaba en Manuel Antonio, desgraciadamente se volvió a notar el paso del turista por un parque nacional. Los coaties se tiraban a las bolsas de los turistas a sabiendas de que llevaban comida. Y lo que es peor, habían aprendido a camelar a los turistas con algún truco como ponerse a dos patas(imagen de arriba) para que el turista les soltara comida. Me da mucha pena ver como especies se acercan cada vez más a su extinción por la acción del hombre.

Mapa del Parque Nacional Volcán Irazú.

Así se veía la cumbre, muy poca vegetación cerca de los cráteres. Parecía un mar de ceniza.

Crater Diego de la Haya. No es el crater principal y nos sorprendimos mucho al verlo ya que fué el primero que vimos. Teníamos otra idea del crater del volcán Irazú con las fotos que habíamos visto. El otro crater estaba a sólo unos 1oo metros de este.

Esto ya nos suena más.

Y una de los dos ahora(después de muchos intentos claro, jeje).

El cielo era impresionante, se había formado un arcoiris circular encima nuestra. Al tener al sol de cara no pude captarlo bien pero en esta foto se aprecia parte de él.

Ana con el paisaje de la cumbre de fondo.

El día era bastante nublado alrededor del volcán. En un día despejado desde la cumbre se pueden ver los océanos Atlantico y Pacífico a cada lado. Lo malo es que los días despejados en la cumbre no son muy corrientes.